El destino está en nuestras manos

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Pregunta: Si el libro del Zohar habla de estados reales, entonces ¿cómo puedo entender el terremoto ocurrido en Chile de la forma más correcta?

Rav: Las dos fuerzas opuestas de las que habla el libro del Zohar, bajan a nuestro mundo y nosotros vemos su revelación en los humanos y en todos los pueblos.

Mientras tanto no vemos el orden real del desarrollo, porque aun no hemos llegado a la realización del sistema de la sabiduría de la Cabalá, a la línea media. Únicamente cuando lleguemos a esto veremos que todo lo que sucede es para nuestro bien. Todo llega en una combinación correcta de las fuerzas opuestas, que nos llevan a florecer, la perfección, la salud, la seguridad, el equilibrio general y como resultado de ello –a la adhesión con el Creador.

Pero mientras no hemos empezado la corrección, mientras que la sabiduría de la Cabalá no se haya expandido en el mundo y los humanos no sientan su misión común, encontrar la Línea Media –no podremos justificar y ver la importancia de las agonías que pasaron sobre el pueblo de Israel a lo largo de la historia, o las que suceden en Chile, Haití y etc.

No sabemos que más nos prepara la naturaleza en el futuro. Debemos apresurarnos y usar la Luz Superior para avanzar hacia el Creador y no seguir y esperar hasta que las fuerzas de la naturaleza nos obliguen a hacerlo por medio de sufrimientos y problemas. Por eso es que nosotros debemos diseminar la sabiduría de la Cabalá lo que más podamos, debemos reconocer que ella es el único medio de avance por la línea media. La línea media es nuestra salvación.

Las dos fuerzas, izquierda y derecha, son muy destructivas. La derecha actúa de forma tan oculta que no se siente en forma directa. Pero puede traernos consecuencias indeseables no menos que la línea izquierda. Por eso es que debemos ayudarnos uno al otro y diseminar la sabiduría de la Cabalá los más ampliamente posible. El destino está en nuestras manos, sólo entonces nos salvaremos de todos los problemas. De no ser así nos esperan golpes tras golpes, si no interferimos en lo que sucede, nos llegarán eventos terribles de los que los profetas escribieron que vendrán en nuestra era.

De la clase del libro del Zohar, 02.03.2010